Los dildos anales son los juguetes sexuales por excelencia para practicar el sexo por la puerta de atrás. Se caracterizan por tener una parte más estrecha que facilita su penetración y una base o stop en su parte trasera que evitará que el juguete penetre más de la cuenta.
Los dildos anales son los juguetes sexuales por excelencia para practicar el sexo por la puerta de atrás. Estos dildos se caracterizan por tener una parte más estrecha que facilita su penetración y una base o stop en su parte trasera que evitará que el juguete penetre más de la cuenta.
Los consoladores o, en su nomenclatura anglosajona, dildos, son tal vez el juguete sexual más antiguo que existe. A diferencia de los vibradores, los dildos no tienen mecanismos electrónicos o mecánicos que los hagan funcionar. Esto hace que sean perfectos, también, para usar en tus aventuras sexuales más acuáticas.
Dentro del mundo de los dildos encontrarás los consoladores anales: los juguetes preferidos que te te abrirán las puertas de un nuevo mundo de placer.
Reconocerás un dildo anal porque suele tener una parte más estrecha que facilita la penetración y una base o stop en su parte trasera, pensada para evitar que tu juguete entre más de la cuenta.
El sexo anal puede proporcionarte sensaciones indescriptibles con las que perderás la cabeza. Pero como todo, introducirte en el mundo del sexo anal es un proceso de aprendizaje. En este caso ¡que puede ser de lo más divertido! Los dildos anales son perfectos para acompañarte en este camino, abriéndote un mundo de estímulos que nunca antes habías sentido.
¿Has sentido ya tu primer orgasmo anal? Entonces ya sabes lo adictivos que pueden llegar a ser.
¿Ya has probado el maravilloso mundo del sexo anal? Alcanzar el orgasmo mediante la estimulación anal es una sensación que no te dejará indiferente.
Sacúdete tus miedos y prejuicios y lánzate. En nuestra tienda online encontrarás dildos anales que te acompañarán en esas primeras experiencias, pero también el consolador anal perfecto para ti, si ya le has cogido el vicio a esto del sexo anal.
En el ano hay una elevada concentración de terminaciones nerviosas que, estimuladas adecuadamente, pueden provocarte sensaciones increíbles.
En el caso de las personas con pene, el ano es la antesala a la próstata, donde se encuentra el punto G masculino y la forma y la forma más accesible de llegar a él. Al ejercer presión sobre la próstata estimularás el también llamado punto P... de placer con mayúsculas. Y tendrás un orgasmo que te elevará a los cielos.
En el caso de las mujeres o las personas con vulva una penetración anal profunda puede estimular el tabique rectovaginal, una pared delgada que se encuentra entre la vagina y el recto, proporcionándote un placer infinito y totalmente distinto a lo que habías sentido hasta ahora.
¡Atrévete a abrirle la puerta a un nuevo mundo de placer! Pero cuidado, que engancha. Y si no que te lo digan a ti, que ya le has cogido el puntillo a esto del sexo anal y la verdad es que ¡o puedes parar!
Tengas pene o vagina, cuando lo pruebes te enamorarás de los consoladores anales.
El sexo anal ha dejado hace mucho de ser territorio exclusivo de hombres homosexuales. ¡Si es que alguna vez lo fue! Cada vez son más los hombres que utilizan la entrada trasera para penetrar a su compañera sexual y hacer realidad una de las fantasías eróticas más placenteras.
Incluso también puede hacerse al revés. Es lo que se conoce como pegging, la práctica sexual de moda que consiste en que la mujer empotre al hombre vía anal. Es excitante, es morbosa y es muy, muy placentera.
También en las relaciones lésbicas un buen dildo anal puede hacerte vivir sensaciones nuevas que te llevarán al éxtasis. Para las mujeres más atrevidas existen dildos anales dobles, con un pene para la puerta de adelante y otro para la puerta de atrás. ¡Sencillamente espectacular!
Estos juguetes sexuales son perfectos para hacer que el sexo en solitario o en pareja sea mucho más divertido. Con los dildos anales explorarás sensaciones nunca antes conocidas, te adentrarás en territorios no explorados y llegarás a auténticos paraísos de placer.
Tal vez sientas un poco de confusión entre todos los modelos que hay. ¡Calma! Te explicamos cómo puedes descubrir el consolador anal hecho para ti.
Estos son los tipos de dildos anales más conocidos del universo de los juguetes sexuales para la puerta de atrás:
Si hablamos de materiales, en el mundo de los dildos anales encontrarás texturas de lo más variadas. Las más habituales son:
El universo de los dildos anales es tan grande que puedes sentir un poco de confusión a la hora de elegir el más indicado para ti. Cuestiones como tu experiencia y tu género pueden influir a la hora de tomar tu decisión.
Por ejemplo, si te estás iniciando en esto del sexo por detrás lo mejor es que comiences por dildos anales más pequeños, con un diámetro no superior a 1,2 centímetros, de punta fina y preferiblemente de un material suave como silicona o gelatina (jelly).
A medida que vayas adquiriendo experiencia podrás ir aumentando el tamaño de tu dildo anal e incluso optar por materiales más firmes y atrevidos como el vidrio. Será una auténtica explosión de placer.
Los kits de iniciación a la estimulación analque tenemos en amantis te abrirán las puertas a este maravilloso mundo. ¿Que ya tienes experiencia? También serán perfectos para ti porque cada juguetito anal nuevo puede proporcionarte sensaciones muy diferentes.
Tu sexo tambié;n determinará cuál es el dildo anal más adecuado para ti.
Por ejemplo, si tienes pene puedes elegir un dildo con punta curva, especialmente diseñado para llegar a la próstata y proporcionar una estimulación que te llevará de cabeza al paraíso.
En cambio, si tienes vagina puedes llegar al orgasmo más explosivo con un dildo anal doble, que también estimule tu clítoris o que puedas introducir por la vulva al tiempo que por el ano. ¡Placer multiplicado por dos!
La puerta de atrás te dará paso a un universo de sensaciones profundas y orgasmos diferentes a todo lo que habías sentido antes. Sin embargo, dadas las características del ano frente al pene o la vulva es recomendable que tomes algunas medidas para que puedas disfrutarlo en todo su apogeo.
El ano no lubrica de forma natural, por lo que para no hacerte daño ni provocarte molestas fisuras debes ir despacito, poco a poco, sintiendo todos los movimientos y sin forzar nada. Además, lo mejor será que uses un lubricante anal que haga que tu dildo anal pase y resbale mucho mejor.
En resumen: usarás tu consolador anal de una manera mucho más segura si tienes en cuenta estas consideraciones:
Además, ten en cuenta que los dildos anales son muy seguros gracias a ese pequeño tope que tienen. Por lo tanto, nunca debes usar un dildo vaginal como dildo anal. En cambio sí podrás hacerlo al revés, pero ten en cuenta que las bacterias de cada zona son muy distintas y suelen llevarse bastante mal entre sí.
Si quieres hacerlo, utiliza tu consolador anal con un preservativo, tal y como harías en caso de que quieras compartir tu juguete sexual con otra persona.
Cuando vayas a usar un dildo anal debes elegir adecuadamente el lubricante que vaya a proporcionarte el mayor placer.
Los lubricantes anales suelen ser más espesos que los lubricantes normales y, en algunos casos, pueden tener un efecto anestésico para eliminar por completo las posibles molestias del principio. Hay muchísimos tipos de lubricantes anales: de aloe vera, con efecto calmante o efecto calor, en monodosis, de larga duración, hechos con ingredientes naturales como aloe vera o Cannabis Sativa, sin siliconas, con sabores…
Una cuestión importante es que a la hora de elegir el lubricante prestes atención al material con el que está hecho tu dildo anal. Un lubricante de silicona es muy deslizante, pero es incompatible con un dildo anal de silicona, ya que tu juguete podría resultar dañado. En este caso debes optar por un lubricante con base acuosa.
Como con cualquier otro juguete sexual, siempre debes limpiar tu consolador anal antes y después de cada uso.
Limpiar los dildos anales suele ser una tarea muy sencilla. Al no tener ningún tipo de mecanismo electrónico puedes sencillamente limpiarlo con agua y un cepillo suave para llegar a los pequeños surcos, si es que los tiene.
Puedes hacerlo con un jabón neutro, aunque lo más recomendable para cuidarlos es utilizar un jabón específico para juguetes sexuales, como nuestro Limpín.
Recuerda siempre la regla de oro: "Si vas a jugar, primero has de lavar"
Una vez limpio, guarda tu dildo anal alejado de la humedad. Evita usar bolsas de plástico o materiales no transpirables. Si queda algo de agua en tu juguete, aunque sea un poco, puede crearse un ecosistema perfecto para la proliferación de bacterias y mohos. Así que intenta guardarlo en un lugar seco, oscuro y en una funda de tela como la nuestra de saten.
Así que ya sabes: sacúdete de mitos y prejuicios y ábrete a este nuevo mundo. Entra por la puerta trasera y explora un universo de placer sin igual con la compañía de los dildos anales. No podrás parar.