Azote/Caricias

Látigos y fustas BDSM para pegar bien fuerte

¿Te has adentrado ya en el erótico mundo de los azotes? Entonces sabes lo excitante que puede ser una buena sesión de spanking que encienda la piel de tu amante con ese toque de color rojito tan sensual.

La mera presencia de los azotadores, fustas y látigos bondage ya resulta enloquecedoramente excitante. Con estos juguetes bondage abrirás las puertas a la tentación de lo prohibido.

¿Eres más de dominar o de que te dominen? Eso da igual. Porque con los látigos y las fustas bondage la diversión está asegurada para l@s dos. Perfectas para llevaros al límite entre el placer y el dolor, con los azotes más excitantes que os llevarán hasta los orgasmos más profundos.

Garantizado: siempre querrás más.

Spanking, o el arte de azotar sin piedad... pero con mucho morbo

¿Has oído hablar del spanking? Es todo un arte sexual, un juego erótico muy relacionado con los encuentros de dominación y sumisión en el que los azotes o nalgadas cobran un papel protagonista.

Puedes practicar spanking con las manos, pero lo cierto es que con las fustas y los látigos bondage experimentaréis sensaciones más intensas propinando o recibiendo picantes azotes llenos de placer. Súmale el morbo de la simple presencia de estos juguetes y tendréis una mezcla explosiva que os llevará a los orgasmos más salvajes.

¿Quieres más? Embellece tus pechos con unas muy eróticas pinzas para pezones. Fetichismo en estado puro.

Los azotadores bondage están pensados para azotar fuerte al mismo tiempo que mantienes esa línea entre el dolor y el placer en perfecto equilibrio. Son los accesorios perfectos para excitar y gozar sin miedo a dañar. ¿Te atreves?

¿Qué tipo de azotadores bdsm existen?

Azotadores, fustas, palas de azote, látigos... Existen varios complementos bondage para los juegos de impacto más ardientes. ¿Cual eliges tú?

• Los azotadores BDSM son complementos elegantes y versátiles gracias a su tamaño, su peso y su ergonomía. Se componen por un mango, que puede estar decorado o no, y un cuerpo con fleco o tiras de cuero o tela. ¿Qué te gusta más, la dureza salvaje del cuero o la suavidad excitante de la tela?
• Las palas de azote son rígidas y de un solo cuerpo, en cuyo extremo se encuentra una pieza ancha con la que propinar tus azotes más salvajes. De bambú, madera o cuero, con perversas tachuelas para un toque muy hard, de doble cara para alternar sensaciones... Tienes muchos modelos entre los que elegir.
• Una fusta BDSM está compuesta por un mango largo, fino y flexible que termina en un recuadro, por norma general de cuero o polipiel, que es con el que azotarás las nalgas de tu amante. A diferencia de las palas de azote, las fustas son flexibles y tienen una superficie menor de azote, para un dolor más punzante y localizado.
• Los látigos bondage suelen estar fabricados en cuero animal o vegano y son mucho más largos, lo que hace su manejo un poco más complicado. Puedes usarlos contra el cuerpo de la persona a la que sometes, pero también dar con él un fuerte golpe contra el suelo que dome hasta a las fieras más salvajes. ¡Ideal para auténtic@s dominatrix!

¿Quién puede usar un azotador bondage?

Los látigos y fustas BDSM son accesorios que podrás utilizar también si te va el sexo más tranquilo. Pues sí, están recomendados para todo tipo de parejas: siempre encontrarás opciones para dar suave y opciones para alcanzar unos azotes tremendos.

Por ejemplo, los azotadores con peluche producirán una sensación a caballo entre una caricia muy sensual y un azotito que eleve el tono a mil revoluciones por segundo. Si lo que te pone es el sexo perverso, también encontrarás azotadores con elementos metálicos como tachuelas que te lleven al extremo.

Además, estos complementos fetisch son tan sencillos de usar que enseguida podrás sacarles mucho, pero que mucho partido. Son herramientas que por un lado están pensadas para causar dolor, pero también para proporcionar placer. Todo depende de cómo y con qué intensidad las uses.

Desde salvajes azotes hasta caricias súper excitantes, este tipo de accesorios BDSM os abrirán las puertas a miles de sensaciones. Eso sí, siempre con el consentimiento y el acuerdo mutuo como regla de oro.

Látigos y fustas BDSM para sensaciones a flor de piel

Los látigos y fustas BDSM son perfectos también para los juegos sensoriales. El sonido y el tacto añadirán un extra de morbo muy intenso a vuestras relaciones secretas. Vístete con un excitante conjunto de lencería erótica de cuero y elevarás vuestro encuentro a cotas de sexo salvaje.

Propina azotes sonoros que os estremecen por dentro, recibe azotes que pican y dejan la piel con un erótico color rojo sin llegar a doler. Con los azotadores bondage conseguirás un sonido de impacto espectacular con el dolor justo.

¿Quieres experimentar aún más sensaciones? Tapa sus ojos con un antifaz que impida a tu amante ver por dónde le vienen los golpes más sensuales. La incertidumbre de lo que vendrá a continuación hará que pierda la cabeza por completo.

También puedes combinar los látigos y fustas BDSM con otros complementos como esposas o kits de inmovilización. ¿Te abres a experimentar con sensaciones diferentes?

¿Qué tipos de fustas y látigos bondage existen?

Cada tipo de azotador produce unas sensaciones muy diferentes sobre la piel. Factores como el tipo de azotador, el tamaño, el material con el que están hechos o la intensidad con la que azotan hacen que cada uno sea especial.

Si hablamos de tamaño debes tener en cuenta que las tiras más cortas son más fáciles de controlar, mientras que con las más largas tendrás más juego. ¡Reservadas para personas experimentadas!

Por lo general, el mango de los azotadores o las fustas tiene un tamaño bastante estándar, aunque su manejo también puede ser importante para quien ejerce de dominatrix. Normalmente suelen llevar una tira que se ata a la muñeca, para que lo tengas localizado cuando tengas que pasar a la acción.

En cuanto al material, los más fuertes son los de metal, aunque no son muy frecuentes, o los de madera, como nuestra pala para azotar de bambú. También existen de cuero animal o vegano, que suelen ser algo más pesados que los de silicona, perfectos para ti si te estás adentrando en los juegos de impacto.

¿Quieres algo más suave? Apuesta entonces por los de peluche y experimenta unas excitantes cosquillas de placer. ¿O tal vez buscas algo más duro? Te encantarán las palas de azotar con tachuelas. ¡Perversión en estado puro!

Qué determina la intensidad del azote

La intensidad o dureza del azote de estos accesorios para el sexo duro viene determinada, sobre todo, por sus dimensiones o el material con el que están fabricados.

Por ejemplo, cuanto mayor sea la superficie de contacto o más tiras tenga, más dolorosos son. Si la tira es más ancha causa más dolor, el golpe es más contundente y deja más señal. Siempre, claro, bajo la seguridad de no dañar más de la cuenta.

Las fustas y azotadores de tiras estrechas producen un tipo de dolor más punzante y selectivo, más localizado. Visualmente, la piel también adquirirá ese color rojo tan sensual que os hace perder la cabeza.

También puedes encontrar accesorios para spanking que incorporen algún elemento, como las tachuelas en unas palas de cuero o algún tipo de cuenta o botón en los extremos. Esto, obviamente, aumentará la intensidad del azote, dándole un punto más allá solo apto para amantes con experiencia bedemesera.

Además, entre las palas de azote encontrarás modelos con relieves de dibujos, letras... Con esto conseguirás incrementar la sensación en el momento del azote y crearás dibujos muy eróticos en la piel de tu amante. ¡Se convertirá en un auténtico lienzo de placer!