Los juguetes eróticos son herramientas de uso íntimo para otorgarnos placer. Gracias a la visibilización y aceptación de los mismos podemos ir dando paso a juguetes que se salen de los cánones e investigan nuevas formas de estimularnos.
Es el caso de SWAN, un juguete que por su peculiar forma sinuosa no para de seducirnos nada más verlo. SWAN se sale de la forma tradicional de los juguetes que teníamos hasta ahora, y se postula como una nueva opción que tiene un sinfín de usos.
SWAN es un juguete que tiene doble estimulación. En uno de sus extremos encontramos un brazo vibrador con una curva pronunciada y con la punta redondeada. Este bracito se convertirá en nuestro mejor colega para explorar zonas G o próstatas, ya que su curvatura nos ayudará a hallar los puntos más escondidos y placenteros de nuestra anatomía.
En el otro extremo encontramos una pequeña boquilla con una succión sónica muy focalizada y profunda. Por si no lo sabías, los succionadores de clítoris sónicos consiguen que la estimulación no solo se aplique al glande externo del clítoris. Gracias a sus toques rítmicos, a través de sus ondas longitudinales, también masajea sus raíces internas haciendo que los orgasmos sean mucho más intensos y expansivos. Agárrate bien porque aunque los SWANs no vuelan, créenos que este sí te hará volar a ti.
SWAN cuenta con una base de carga donde podrás apoyarlo y cargarlo cómodamente, algo que nos resultará especialmente útil para mantener la higiene del juguete.
¿Cómo de bonito es alternar diferentes estimulaciones y no quedarnos siempre en la misma sensación? Con los juguetes eróticos se juega, y jugando se aprende, así que te proponemos que aprendas a escuchar lo que te pide el cuerpo y que, con las infinitas posibilidades que SWAN te ofrece, explores todas las opciones.
No olvides que los juguetes son un elemento maravilloso para introducir en las relaciones. Al tener dos lados que se usan de manera alterna, este juguete tiene muchas papeletas para convertirse también en un juguete compartido en todo tipo de relaciones sexuales.
- Vibrador con succión sónica
- Medidas: 9 cm largo, 3 cm ancho
- Materiales: Silicona de grado médico + ABS
- Colores: azul y púrpura
- 2 horas de uso continuado
- 120 minutos para una carga completa
- 9 modos de vibración
- Sumergible IPX7
- Recargable (cargador USB incluido)
- Silencioso
Cómo se usa SWAN - Vibrador con succión sónica
Es muy importante generar deseo antes de disponernos a estimular nuestro cuerpo. Te animamos a que te excites con aquello que te encienda por dentro, ya sea la música, alguna fantasía o recuerdo, o algún estímulo visual.
Tu cuerpo te irá diciendo qué ritmo e intensidad necesita. Te sugerimos que apliques un lubricante de base acuosa como Desliz! a tu vulva dando un suave masaje para despertar todas las terminaciones nerviosas y prepararla para un viaje intenso de sensaciones fuertes.
Comienza activando las vibraciones del bracito curvado y úsalo haciendo movimientos circulares en la entrada de tu vagina. También puedes usar esta vibración para estimular cualquier parte erógena del cuerpo. Cuando el cuerpo te lo pida puedes comenzar a introducirlo con la parte redondeada mirando hacia arriba tanto para estimular la zona G como para la zona P. Te sugerimos movimientos de palanca articulando el juguete desde arriba hacia abajo sin que pierda su eje.
Cuando sientas que el deseo se ha generado y que tu cuerpo comienza a estremecerse, puedes empezar a estimular tu clítoris con la vibración del bracito, y a su vez posar todo el juguete sobre tus labios internos y externos provocando así que el placer se expanda a todos los rincones de tu vulva. Lo más sensible, y por tanto lo último que debería ser estimulado es el clítoris, que solo cuando sientas que él te lo pida puedes aplicarle la succión sónica, y a su vez alternarlo con la estimulación de zona G.
Se nos ocurre que explores con tu pareja diferentes posturas, ya que la alternancia de los brazos os permitirá compartir y encontrar una sincronía que parecerá que iréis en la bicicleta tándem del placer.
Por último, te recomendamos que lo laves antes y después con nuestro jabón bactericida Limpín.