Los succionadores son un juguete sexual pensado para generar un efecto ventosa y estimular diferentes partes de tu cuerpo. Diseñados tanto para usar de forma individual como para jugar en pareja. Simples, complejos o con varias velocidades, descubre porque los succionadores son tan populares y pon uno en tu vida.
Los succionadores ...
Un succionador sexual, como su nombre indica, sirve para crear un efecto de succión en diferentes partes del cuerpo. Los succionadores se presentan en diferentes tamaños, colores y formas, con o sin motor, ofreciendo diferentes técnicas de succión muy placenteras.
Lo que caracteriza a un succionador sexual es su boquita succionadora ya sea por ondas vibratorias o efecto vacío, creando un efecto muy parecido al que sentirías si tu pareja te estuviese practicando sexo oral.
A diferencia de los vibradores, en general los succionadores no están pensados para ser introducidos en ningún orificio, aunque existen vibradores succionadores que crean la combinación perfecta de estimulación interna y externa para ver fuegos artificiales desde tu habitación (o donde sea).
Existe la mala concepción de que los succionadores son solo para el clítoris, ¡error! Los succionadores sexuales pueden ser utilizados en diferentes zonas del cuerpo, el límite es tu imaginación. Algunos tipos de succionadores sexuales que puedes encontrar son:
Los succionadores de clítoris son los más famosos, están pensados para estimular el clítoris mediante un sistema de aire pulsado que provoca esa sensación de succión.
Un succionador de clítoris puede ser tu mejor aliado para conocerte a fondo. Este juguete simula la sensación de los labios de tu amante, pero con mayor control e intensidad. Emite pulsaciones y vibraciones para estimular tu clítoris sin tocarlo directamente, permitiéndote alcanzar orgasmos intensos y rápidos.
Estos succionadores varían en modelos e intensidades, muchos incluyen complementos de silicona o texturas diferentes. Puedes utilizarlos en solitario o en pareja, y además de vivir una experiencia tan placentera que será inolvidable, también mejorará tu lubricación y excitación.
Utilizar un succionador de clítoris mientras estás manteniendo relaciones sexuales con tu pareja es una práctica cada vez más común, muchas veces no se consigue el orgasmo de forma vaginal así que hay que darle un pequeño empujoncito al asunto.
Alguno de estos succinadores de clítoris incorporan también un segundo vibrador para estimular el punto G simultáneamente y conseguir que te correas en segundos con esta doble estimulación digna de los Dioses.
Un succionador de pene es un masturbador masculino, generalmente cilíndrico, diseñado para envolver el pene y proporcionar unas sensaciones tan intensas que alargarán tus erecciones y te harán llegar al clímax.
Estos succionadores funcionan creando una sensación de vacío similar al sexo oral, algunos modelos incluso incluyen vibración para aumentar el placer.
Existen varios tipos, como los realistas, con texturas suaves que imitan la piel o los desarrolladores, que además de placer ayudan a que tengas erecciones más potentes. Para usarlo, es muy importante aplicar lubricante generosamente y ajustar las intensidades de vibración para conseguir una experiencia cómoda y placentera.
Prueba la doble función de estos succionadores, desarrolla el tamaño de tu pene y experimenta el placer máximo prácticamente sin utilizar las manos.
Los pezones, a menudo olvidados, son una de las zonas más sensibles del cuerpo. Un succionador de pezones puede ofrecerte la sensación de los labios de tu pareja en tus pechos que tanto te gusta.
Estos succionadores estimulan y endurecen los pezones, e incluso pueden hacer que tengas un orgasmo si dejas volar tu imaginación. Pueden encontrar succionadores de pezones manuales, que te permiten controlar la intensidad de la succión, y otros recargables, que incorporan un pequeño motor con vibración.
Coloca la boquilla sobre los pezones, ajusta la intensidad y disfruta de una nueva dimensión de placer que te pondrá a cien tanto a ti como a tu pareja.
Un succionador vaginal está diseñado para estimular la vulva y la entrada vaginal haciendo que tus labios vaginales sean más gorditos y proporcionarte un placer y una excitación sin igual.
Al succionar los labios vaginales, aumenta el flujo sanguíneo, dándoles un aspecto más rosado y carnoso, ideal para aumentar la excitación. Existen dos tipos de succionadores vaginales, un succionador masajeador, que estimula con vibraciones, y un succionador desarrollador, que crea vacío alrededor de la vulva para intensificar las sensaciones y darle a tus labios un aspecto más regordete.
Su placer no se limita a una sola zona, puedes usarlo en labios, clítoris, pezones, e incluso testículos, atrévete a descubrir nuevos horizontes en pareja con un succionador vaginal.
Entendemos que escoger un succionador sexual es como entrar en una tienda de golosinas y no saber a dónde acudir entre tantos caramelos, así que vamos a ayudarte. Una de las preguntas que debes realizarte a la hora de escoger un succionador es ¿voy a usarlo en pareja o es solo para mí?
Al existir diferentes succionadores para diferentes partes del cuerpo, nuestra recomendación es utilizar los succionadores de pezones y vaginales en pareja para hacer tu encuentro más divertido. Esto no quita que cualquier succionador pueda ser un gran aliado en tus encuentros sexuales, ¡algunos permiten ser utilizados con dos clítoris a la vez!
Si lo que buscas es algo más personal e íntimo, para relajarte tu solito después de un día largo de trabajo mientras te tomas un baño, quizás un succionador de pene o de clítoris sea la opción adecuada para ti.
¿Y en cuanto a materiales, tamaños y formas? Si te va la marcha y buscas algo más que succión y estimulación por ondas, prueba con un succionador que incorpore también un dildo o percutor para introducir en la vagina. Si buscas algo más pequeño para poder llevártelo de viaje, también existen succionadores de menor tamaño para que el orgasmo siempre te acompañe.
Los diseños son muy variados, puedes encontrar algunos más realistas, de colores llamativos, de boquillas más grandes o pequeñas… Si dudas, empieza escogiendo el que más te entre por los ojos, ¡siempre estás a tiempo de adquirir nuevos juguetes para agrandar tu colección!